La provincia de Manabí, donde se encuentra la Reserva Lalo Loor, alberga algunos de los últimos fragmentos del bosque seco costeno altamente amenazado de Ecuador. Dado que solo existe un 2% de este hábitat, conservar y conectar estos parches representa una prioridad crítica para preservar la biodiversidad y movimiento de especies. Ceiba promueve la protección de los bosques, incentivos de conservación para los propietarios de tierras, y proyectos de reforestación gestionados localmente, para conectar más de un cuarto de millón de acres de fragmentos de bosque a través de un innovador Área de Conservación y Uso Sostenible (ACUS). La conservación y reforestación de los bosques formarán un corredor biológico que se extenderá por más de 135 km y abraza una variedad de microclimas y tipos de hábitat. El corredor atraviesa cuatro condados y cruza la lína equinoccial ecuador, uniendo efectivamente los hemisferios norte y sur. Además estamos fomentando la adopción de sistemas agroforestales como el café y el cacao, en los que los cultivares se plantan bajo árboles de sombra; dichos sistemas crean un “bosque analógico” que satisface las necesidades económicas del propietario de la tierra y al mismo tiempo maximiza la biodiversidad.
En alianza con cuatro municipios de Manabí, Ceiba ha establecido una nueva Área de Conservación y Uso Sostenible (ACUS). La declaración promueve usos sostenibles de la tierra que satisfacen las necesidades económicas de los propietarios y al mismo tiempo permite que florezca la flora y la fauna local. El ACUS comprende más de 206.000 hectáreas de superficie total, incluidas más de 112.000 hectáreas de bosque. El Corredor de Conservación de Ceiba se encuentra dentro del área planificada. Proporcionar un marco legal para la conservación y el uso sostenible es imperativo para el éxito a largo plazo del proyecto del corredor y el ACUS ayuda a garantizar que los propietarios locales tengan el apoyo de su gobierno. Dentro de este programa, continuamos promoviendo la conectividad de los bosques a través de la restauración y reforestación, asistencia técnica y capacitación a propietarios de tierras y educación pública sobre los beneficios de las prácticas de conservación y uso sostenible de la tierra. Para más información sobre este proyecto consulte el Resumen Ejecutivo de ACUS y la hoja informativa de ACUS (ambas en español).
La iniciativa de las ACUS del Noroccidente de Manabí está conformada por una coalición de Áreas Municipales de Conservación y Uso Sostenible, las cuales fueron declaradas mediante ordenanza municipal en 2019 e incluyen:
La creación de una ACUS en el cantón Sucre está en ejecución y actualmente se considera una iniciativa funcional en las áreas de incidencia.
Nuestro objetivo es colaborar con los propietarios de tierras locales, promoviendo la restauración forestal y el uso sostenible de los recursos naturales de la región para aumentar la productividad de la tierra mejorando la fertilidad del suelo, la calidad del agua, el secuestro de carbono y la conservación de la biodiversidad. Este proyecto multifacético se vincula con nuestros programas de investigación en curso y nuestros crecientes programas de estímulo económico y desarrollo comunitario. Todo comenzó con la reserva del Bosque Seco Lalo Loor, establecida en 2004 para proteger un par de cientos de hectáreas de bosque tropical caducifolio, pero esta increíble región merece un plan de conservación mucho más amplio y, con su ayuda, se está convirtiendo en una realidad.
Incentivos de conservación promovidos:
A medida que se acelera el cambio climático global, la movilidad de la vida silvestre se vuelve cada vez más importante. La costa central de Ecuador, que se encuentra dentro del Hotspot de Biodiversidad Tumbes-Chocó-Magdalena (qué es un hotspot?), abarca un impresionante gradiente de precipitación: desde más de 8 metros (26 pies) de lluvia en los bosques tropicales del Chocó de Colombia hasta el desierto del norte del Perú donde la humedad atmosférica es prácticamente desconocida. Sin embargo, alrededor de la reserva Lalo Loor, vemos una transición muy rápida de los bosques húmedos del norte a los desiertos muy secos del sur, y la reserva es única en la protección de plantas y animales característicos de ambas regiones. A lo largo del corredor de 135 kilómetros, notamos una disminución anual de las precipitaciones de 960 milímetros a sólo 460 milímetros. El gradiente no solo es de norte a sur, sino también desde elevaciones bajas hasta los picos de las montañas de la Cordillera Costera: observe las montañas de un azul más oscuro que se curvan alrededor de la reserva. La diversidad climática en esta área compacta es un enorme beneficio para la vida silvestre y las plantas, siempre que puedan moverse en respuesta a los impactos del cambio climático.
Algunas de las especies amenazadas en esta área que estamos trabajando para proteger incluyen el mono capuchino cariblanca ecuatoriano (Cebus aequatorialis, en peligro crítico), el mono aullador de manto ecuatoriano (Alouatta palliata ssp. aequatorialis, vulnerable), el halcón lomo gris (Pseudastur occidentalis, en peligro de extinción), y la chachalaca cabecirrufa (Ortalis erythroptera, vulnerable). El Área de Conservación y Uso Sostenible también cubrirá zonas costeras, una novedad en proyectos de conservación basados en condados en Ecuador. Las playas que allí se encuentran incluyen sitios de anidación vitales para la tortuga marina verde (Chelonia mydas, en peligro de extinción) y la tortuga lora (Lepidochelys olivacea, vulnerable). Si somos capaces de salvar los parches de bosque restantes y revertir la marea de deforestación, estos animales tendrán una oportunidad de sobrevivir a los impactos del uso de la tierra de hoy y los desafíos del cambio climático del mañana.
Gracias a las subvenciones del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. en 2018 y 2021, estamos trabajando con 19 propietarios para restaurar 206.000 cientos de hectáreas de tierra para conectar fragmentos de bosque existentes. Ceiba está apoyando a los 9 viveros de árboles locales que suministrarán las plántulas y desarrollarán la capacidad local. Trabajamos con cada propietario para crear planes agrícolas personalizados para satisfacer mejor las necesidades de los propietarios. Las técnicas de restauración incluyen la regeneración asistida, la reforestación y la agrosilvicultura, incluida la silvopastura. Hasta el momento hemos plantado un total de 12.000 árboles, todas especies nativas de la región. El seguimiento es un aspecto clave del trabajo de restauración que seguimos construyendo. Estamos evaluando mamíferos terrestres utilizando cámaras trampa para establecer datos de referencia que nos ayudarán a determinar los movimientos de los animales a lo largo del corredor y refinar mejor nuestras técnicas de restauración para apoyar a la fauna local. El próximo año, nos esforzaremos por desarrollar protocolos de monitoreo de áreas restauradas que los propietarios de tierras puedan implementar por sí mismos. Continuaremos realizando talleres en la región para desarrollar capacidades para la agricultura sostenible y el bio-emprendimiento. Otras actividades incluyeron trabajar con escuelas locales para incorporar educación ambiental y actividades de reforestación para niños. Los resultados de nuestra subvención del USFWS 2018-2019 están disponibles en nuestro informe final (ENG).
Nuestro enfoque de trabajo es integral, promovemos un trabajo en redes de cooperación local con diferentes actores públicos, privados y comunitarios, todos y todas convocados a seguir creyendo que es posible cuidar nuestra casa grande desde una acción de corresponsabilidad humana.